Una fiesta llena de amor y recuerdos en el Día de Muertos en San Felipe Hueyotlipan, Puebla
El Día de Muertos en el panteón de la junta auxiliar de San Felipe Hueyotlipan fue una verdadera fiesta, donde las familias bailaron, cantaron e incluso bebieron junto a las tumbas de los fieles difuntos para celebrar su llegada en este 2 de noviembre.
Durante un recorrido realizado por El Sol de Puebla, se pudo observar cómo decenas de ciudadanos se reunieron en este camposanto. No solo llevaron flores o arreglos para las tumbas, sino que también trajeron comida y bebidas alcohólicas para brindar por estas fechas tan especiales.
Ubaldo, uno de los visitantes, compartió que él y sus ocho hermanos acuden cada año a visitar la tumba de sus padres, abuelos y cuñada. Como si fuera una fiesta, platican, ríen e incluso brindan por ellos.
"Esto es una tradición que año con año nos enseñaba nuestra mamá (...). Venimos desde las 9 o 10 de la mañana y estamos con ellos. Les ponemos las canciones que les gustaban, les ponemos un vasito de cerveza y convivimos. Es como una celebración para nuestros seres queridos porque no murieron, sino que viven en el corazón", dijo Ubaldo emocionado.
Pero eso no es todo: también les cantan y bailan reproduciendo sus canciones favoritas cuando estaban vivos para alegrar su visita durante estas fechas tan especiales. Para ellos adornar las tumbas y arreglarlas es parte fundamental del Día de Muertos. En su casa colocaron una ofrenda con los alimentos favoritos de los difuntos, como dulce de calabaza y otras conservas. Al finalizar su estancia en el panteón, regresaron a su hogar para despedirse de sus seres queridos.
"Me decían los maestros '¿Cuál es el día más feliz de tu vida?' y yo les respondía: 'El día 2 porque viene mi mamá a visitarnos. Es el día más feliz de mi vida, el día 2 de noviembre'", aseguró Ubaldo con lágrimas en los ojos.
Por otro lado, Cipriano también recordó a su madre durante esta festividad. La describió como una mujer bondadosa y amorosa que siempre fomentó la unión entre sus nueve hijos. Para él, esta fecha no es triste sino todo lo contrario, ¡es una verdadera fiesta!