La lucha por la representación política de las mujeres en los gobiernos municipales de Puebla: lejos de la paridad

La representación política de las mujeres al frente de los gobiernos municipales en Puebla dista mucho de ser equitativa. A pesar de las leyes aprobadas en la materia, solo dos de cada diez candidatas femeninas logran ganar las elecciones, y más del 57% de los municipios del estado no han sido gobernados por una mujer en más de dos décadas, según datos del Instituto Electoral del Estado.

Según un estudio realizado por el Instituto Electoral y el Buró Parlamentario, se postularon 917 mujeres como candidatas a presidencias municipales en las últimas elecciones, pero solo 190 lograron la victoria, lo que representa apenas el 20.7%. Además, 125 municipios no han tenido alcaldesas en los últimos 21 años.

Las lagunas legales y una cultura machista son causas importantes que impiden que la paridad de género alcance los gobiernos municipales. Si bien actualmente existe un marco legal que obliga a los partidos políticos a postular igual número de mujeres y hombres para cargos políticos, esto solo cambió recientemente en 2018. Durante el periodo comprendido entre 2001 y 2021, tres cuartas partes de las candidaturas para presidir ayuntamientos fueron para hombres.

Según el Código Electoral estatal, los partidos están obligados a garantizar la paridad de género en las candidaturas y la integración de los ayuntamientos. Sin embargo, no existe una reglamentación específica para garantizar que la mitad de los ayuntamientos estén encabezados por mujeres.

La cultura política y cívica es uno de los principales obstáculos para la participación de las mujeres en la política, según la doctora Alexandra del Carmen Jima-González. La creencia de que las mujeres no están capacitadas para ocupar cargos de toma de decisiones sigue siendo prevalente y se ven expuestas a presiones y críticas injustas durante las campañas electorales.

Aunque no hay datos precisos sobre agresiones contra candidatas a presidencias municipales, es necesario destacar que el Instituto Nacional Electoral cuenta con un registro público de personas sancionadas por violencia política de género. Puebla ocupa el lugar 13 a nivel nacional en número de agresores identificados.

La construcción de una cultura equitativa requiere un cambio profundo en la actitud del electorado hacia las mujeres en la política, así como una mayor exigencia hacia los partidos políticos para cumplir con las leyes relacionadas con la participación femenina.

Las especialistas proponen un trabajo conjunto entre partidos políticos, organismos electorales y órdenes de gobierno para eliminar los estereotipos negativos asociados a las mujeres que participan en la política. Es necesario priorizar la educación cívica, especialmente entre los jóvenes, para combatir prejuicios y comentarios despectivos en línea que influyen negativamente en el voto.

Además, los partidos deben transmitir adecuadamente las cualidades y potencialidades de las candidatas femeninas y dejar atrás prácticas que invisibilizan sus fortalezas individuales. Se requiere un compromiso serio por parte de los partidos políticos para garantizar una participación equitativa y efectiva de las mujeres en todos los niveles políticos.

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