La falta de inversión en estancias infantiles y escuelas de tiempo completo en México ha generado violencia y limitado las tareas de crianza familiar, según Clara Jusidman Rapoport
La economista y activista Clara Jusidman Rapoport ha señalado que la política salarial del Estado mexicano en las últimas cinco décadas, junto con la falta de inversión en estancias infantiles y escuelas de tiempo completo, entre otras carencias, ha limitado las tareas de crianza debido al poco tiempo de convivencia entre familias. Esta situación ha dado lugar a la generación de violencia en el país.
Durante el foro "Diálogo Nacional por la Paz" realizado en la Universidad Iberoamericana Puebla, Jusidman Rapoport destacó que el Estado mexicano ha fallado a las familias al no proporcionar los cuidados necesarios en la crianza e inclinarse hacia el beneficio económico de los poseedores de riqueza.
La economista detalló que los expresidentes Luis Echeverría Álvarez, José López Portillo y Pacheco, Miguel de la Madrid Hurtado y Carlos Salinas de Gortari implementaron una política salarial que disminuyó cada vez más el poder adquisitivo de los mexicanos. Esto provocó una reducción en el trabajo reproductivo y cuidados dentro del núcleo familiar.
Según Jusidman Rapoport, esta situación se detuvo hasta el sexenio del expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León (1994-2000), cuando se detuvo la caída libre del poder adquisitivo. Sin embargo, durante ese periodo tampoco mejoraron las condiciones para las familias debido a la falta de inversión en espacios públicos para cuidado infantil.
Las familias más afectadas son aquellas con hijos, ya que deben sacrificar tiempo destinado a su crianza para trabajar y asegurar su supervivencia, destacó la economista. Además, señaló que durante la administración actual de Andrés Manuel López Obrador no se ha invertido capital público en estancias infantiles ni se ha continuado con el programa de escuelas de tiempo completo.
La negligencia por parte de los gobiernos también se evidencia en el control insuficiente del crecimiento urbano y territorial, ya que las últimas décadas han visto un aumento en la construcción de viviendas de baja calidad alejadas de las ciudades y con pocos servicios. La falta de sistemas eficientes de transporte público también limita las posibilidades para una crianza responsable.
Todo esto ha llevado a una desintegración del tejido social, lo cual fortalece a los grupos criminales que operan en el país desde hace años. El abandono por parte del gobierno hacia las familias también ha debilitado a aquellos municipios encargados inicialmente del combate a la criminalidad.
En resumen, Clara Jusidman Rapoport argumenta que la política salarial y la falta de inversión gubernamental han afectado negativamente a las familias mexicanas durante varias décadas, generando violencia e inseguridad en el país.