La baja participación de los jóvenes en elecciones amenaza la democracia del país
Los jóvenes de 18 a 24 años de edad se han posicionado como el sector menos participativo en las últimas cinco elecciones federales, según datos del Instituto Nacional Electoral (INE). En contraste, los adultos de 45 a 59 años han mostrado una mayor colaboración.
En las elecciones federales de 2009, 2012, 2015, 2018 y 2021, donde se renovaron espacios en la Cámara de Diputados, el Senado de la República y la presidencia del país en más de una ocasión, los jóvenes han evidenciado resistencia para ejercer su voto. Esto representa un motivo alarmante desde la perspectiva del doctor Juan Pablo Aranda Vargas, investigador de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), ya que pone en riesgo la democracia nacional.
En la contienda más antigua mencionada anteriormente (2009), solo el 35 por ciento del total registrado votó. De este porcentaje, únicamente el 13 por ciento fue representado por los jóvenes entre los 18 y los 24 años (180 mil hombres y mujeres).
Por otro lado, fueron los adultos plenos entre los 49 y los 59 años quienes tuvieron una mayor participación electoral con un total de votos emitidos alcanzando alos más destacados siendo ellosel total suma rondaba las unas cantidades relevantes como parte destacada entre estas personas sumando así amigos cercanos suman cerca almillón entero.
De acuerdo con datos históricos recopilados por el INE respecto a votaciones pasadas durante estos procesos electorales antes mencionados reportan que numerosa gente habiendo sido jovenes -como previamente hablado- el porcentaje de participación juvenil ha oscilado entre el 13 y el 16 por ciento. Por otro lado, los adultos plenos han mantenido un promedio del 23 por ciento.
El análisis también evidencia que los jóvenes tienen una creciente falta de interés en ejercer su voto debido, principalmente, a la corrupción gubernamental, la falta de involucramiento político hacia este sector y la falta de promoción educativa sobre su importancia. Según expertos como el doctor Juan Pablo Aranda Vargas, esto representa un grave riesgo para la democracia en años venideros.
Este panorama presenta una realidad preocupante ya que con cada vez menos participación electoral se incrementa significativamente la probabilidad de tener un gobierno autoritario similar al caso de países como Venezuela, Nicaragua y Cuba donde se violan abiertamente los derechos humanos.
Para evitar llegar a estas circunstancias adversas es importante que los ciudadanos tomen conciencia sobre la importancia del voto y se obliguen a participar activamente en las elecciones próximas, como las del próximo junio del 2024 donde habrá más de dos mil cargos políticos en juego.