El transporte irregular se expande en Puebla: ¿qué dicen las autoridades?

El transporte irregular local y foráneo se ha vuelto una problemática cada vez más frecuente en Puebla. En distintos puntos de la capital del estado y la zona metropolitana, numerosas unidades, incluyendo camionetas y automóviles particulares, operan ofreciendo servicios de viajes diarios dentro y fuera de Puebla sin la debida autorización estatal o federal.

La falta de vigilancia por parte de las autoridades competentes ha permitido que estas unidades realicen sus trayectos atractivos precios que superan en un 50 por ciento a los ofrecidos por empresas establecidas. Lugares públicos en municipios como Puebla y San Andrés Cholula se han convertido en sitios comunes para ver vehículos brindando este tipo de transporte con matrículas particulares incluso provenientes de otros estados como Tlaxcala o el Estado de México.

Estos servicios se ofrecen a pocos pasos de terminales reguladas como la Central de Autobuses (CAPU) o bases reconocidas como la empresa ORO. Sin embargo, muchas personas prefieren utilizar estos servicios irregulares debido al significativo ahorro que representan a pesar del desconocimiento sobre si están protegidos con algún seguro durante su viaje.

Un claro ejemplo es Teziutlán, un destino popular ubicado cerca a 150 kilómetros del centro de Puebla donde los viajes pueden costar hasta 200 pesos por persona, lo cual representa una tarifa considerablemente más barata que las empresas convencionales. Otros destinos como Oaxaca también son ofertados en condiciones similares con tarifas aún más bajas.

Además, tanto en Puebla como en San Andrés Cholula existen paraderos improvisados donde taxis ilegales y combis pirata realizan viajes no autorizados hacia municipios cercanos sin cumplir con las normativas establecidas para este tipo de transporte. A pesar del riesgo evidente que implica utilizar estos servicios irregulares, muchos usuarios optan por su rapidez e incluso menor costo comparado con las opciones legales disponibles.

Es importante recordar que estas prácticas incumplen tanto la Ley estatal del Transporte como regulaciones federales respecto al autotransporte, sin embargo hasta el momento ni la Secretaría directamente involucrada ni la Secretaría estatal correspondiente han emitido comentarios al respecto.