El regreso a casa de Mario Marín: de la cárcel a arraigo domiciliario en Puebla

El político acusado de torturar a la periodista Lydia Cacho en 2005, Mario Marín Torres, continuará su proceso legal con arraigo domiciliario en Puebla. Tras una audiencia realizada el sábado 10 de agosto donde se resolvió un amparo presentado por los abogados defensores, se concedió el cambio a medida cautelar y se le impuso una multa económica de 100 pesos. Asimismo, quedará en libertad bajo la condición de utilizar un brazalete localizador y tendrá un arraigo en Puebla.

El caso de Mario Marín se remonta a 2005 cuando Lydia Cacho publicó el libro "Los demonios del edén" denunciando una red de explotación sexual infantil que involucraba a políticos mexicanos y empresarios como Jean Succar Kuri y Kamel Nacif. Tras ser detenida injustamente por agentes de la Policía de Puebla, Cacho fue torturada física y psicológicamente durante un viaje hacia Puebla.

Después de que se filtrara una llamada entre Mario Marín y Kamel Nacif, donde este último felicitaba al ex gobernador por su manejo del caso, Cacho denunció a ambos por tortura. A pesar de haber sido absuelto inicialmente, años después fue nuevamente detenido y ahora enfrentará su proceso con medidas restrictivas pero fuera del penal.

La actuación judicial ha generado polémica y revuelo mediático debido al grave caso que involucra no solo a figuras políticas sino también a derechos humanos fundamentales violados en la sociedad mexicana. La historia continúa desarrollándose con nuevas revelaciones e investigaciones que buscan esclarecer los hechos ocurridos hace más de una década.