El milagro del Señor de las Maravillas en la salud de Carlos
María Elena estuvo al borde de perder a Carlos, su hijo más joven. A los pocos meses de que cumplió un año, le diagnosticaron un grave problema cardíaco que parecía no tener solución. Sin embargo, actualmente Carlos se encuentra en buen estado de salud, un verdadero milagro atribuido al Señor de las Maravillas, uno de los santos más venerados en el estado de Puebla.
"Tenía solo un uno por ciento de probabilidad de sobrevivir", declaró su madre. Desesperada por la salud precaria de su hijo, buscó la ayuda y el amparo del mencionado santo para rogarle una vida larga y estable para Carlos.
"Implore con todas mis fuerzas que me diera la oportunidad de estar junto a mi hijo, cuidarlo y verlo crecer. Si era su voluntad llevarlo consigo, aceptaba eso sin embargo le pedí que no sufriera", relató emocionada.
Esta historia es solo una entre muchas en Puebla. Cada 1° julio miles devotos se congregan desde diferentes partes del estado en el Templo del Señor de Las Maravillas ubicado en el centro histórico capitalino.
Este año no fue la excepción; desde tempranas horas llegaron miles pobladores a las instalaciones religiosas para entonar "Las Mañanitas" dedicadas a este santo como muestra gratitud por los milagros concedidos.
Algunos hicieron grandes arreglos florales e imágenes que quedaron junto al altar en señal desu aprecio hacia esta divinidad religiosa mientras otras familias decidieron obsequiar comida afuera del templo como mostra especial gracias por las bondades recibidas.
Por eso, no fue extraño ver una larga fila de creyentes que luego de visitar al Señor de las Maravillas decidieron deleitarse su paladar con algunos alimentos como mole, chancla, atole o un pan dulce.
"No solo es cuestión de fe, sino lo que él ha hecho por nosotros", compartió otra ferviente devota quien aseguró sentir un inmenso respeto y admiración hacia el santo y afirmó que esa conexión seguirá vigente durante muchos años ya que gracias a él muchas familias han recuperado su felicidad.